viernes, 27 de diciembre de 2013

El poder de elegir

Tenemos el poder de elegir ciertamente, pero eso no se reduce al color de la ropa que usamos ni a la comida que nos apetece.
Ni siquiera a los amigos que tenemos, donde pasamos las vacaciones o que clase de trabajo queremos hacer
No, es mucho mas que eso, tenemos el poder de elegir como experimentamos esta realidad, el verdadero poder esta en elegir la actitud con que enfrentamos los conflictos y las emociones que día a día se nos presentan.
Podemos hacer caso al ego y tomarnos los pequeños o grandes contratiempos de nuestra vida como algo personal, algo que esta ahí para hacernos la vida imposible y regocijarnos en nuestra desgracia para que todo el mundo sepa lo dura que es nuestra vida.
Esta es una opción del todo valida puesto que si así lo elige alguien es porque esta en su derecho de elegir.
Otra opción es ver lo que nos sucede como algo ajeno a nosotros, algo que no afecta a nuestro YO interno y extraer la enseñanza que la experiencia nos trae, ver las cosas con cierta distancia, sabiendo que nada de este mundo nos puede dañar, que todo lo que ocurre tiene un porque y que muy probablemente necesitamos experimentar esto para nuestro mejor entendimiento.
Optando por este enfoque, por esta elección, cualquier cosa que estemos viviendo en esta realidad nos sera útil para nuestro aprendizaje, no distraeremos nuestro trabajo interior con pensamientos y aun actos inútiles de venganza, represalias o recompensas.
Simplemente atravesaremos la experiencia en paz y en paz entenderemos su significado.
Esto ademas de aportar bienestar emocional, también nos trae bienestar físico ya que la mayoría de las enfermedades están causadas por conflictos no resueltos.
Si no creamos conflicto no hay nada que resolver.
En definitiva TU ELIGES como vives la experiencia y como la integras en tu vida.
Pilar.

jueves, 26 de diciembre de 2013

La otra

Aparco el coche como siempre a dos calles de su casa, nunca había sitio mas cerca, cogió el bolso, cerro y se encamino al piso donde vivía sola desde hacia quince años.
Contemplo su rostro en el ascensor, ni rastro del tenue maquillaje que se puso esa mañana, unos mechones rebeldes habían escapado del cómodo recogido que se hacia todos los días entre sorbo y sorbo del primer café
Cerro la puerta tras de si, pensando en que tendría que cocinar para la cena.
Se quito el abrigo gris y los zapatos de talón bajo y los dejo en el armario de la entrada junto con el bolso negro y discreto y se encamino a la cocina… y de pronto la vio
Sentada en su sala de estar había una mujer que la miraba sonriente
- Pero bueno que ¿hace usted aquí? Esta es mi casa
- Te estaba esperando Inés, ¿no me recuerdas?
- ¿Como voy a recordarla si nunca la he conocido?
- ¿seguro? ¿No recuerdas cuando salíamos a divertirnos juntas?
- ¿cuando salíamos con aquel novio que tenias?, ¿como se llamaba? ¿Andrés no?
- ¿Pero que esta diciendo? Y ¿como sabe mi nombre? ¿de que conoce a Andrés?
Se fijo bien en la mujer, lucia un colorido vestido, bien ceñido, sus largos cabellos le caían graciosamente por los hombros enmarcando su cara y resaltando el color gris de sus ojos, unos bien delineados labios rojos y su expresión era de confianza, de esas mujeres que se sienten bien con sigo mismas, algo que Inés no sentía en absoluto
- Pero ¿estas loca? Si no te conozco
- Jajajaaj si… siempre he sido un poco loca, ¿recuerdas? Tu madre nos lo decía, juntas nunca haríamos nada en la vida
Inés se acordaba, su madre pronuncio tantas veces esa sentencia que termino por cumplirse
- ¿como sabes aso? ¿lo que decía mi madre?
- ¿Estas segura que no me reconoces?
Dijo levantando una ceja con aquel típico gesto que hacia su madre y que ella también hacia antes… cuando era mas joven.
¿Mas joven? ¿mas joven que quien? ¿que cuando? Esa mujer le estaba haciendo recordar cosas que creía olvidadas
-He venido para quedarme, si quieres… claro
-Y bien ¿que decides? ¿Quieres que me quede?
No lo dudo ni un momento, vio en esa mujer, a la mujer que ella misma llevaba dentro, oculta durante tantos años, no eran casuales sus ojos grises ni sus gestos tan familiares, sus referencias a un tiempo pasado.
Inés empezó a sonreír, se soltó el pelo y empezó a cantar una vieja canción y si… acepto a esa mujer como parte de ella misma, desde entonces van juntas a todas partes, su vida ha cambiado, tiene otro color, otra forma, tiene sentido
Pilar

martes, 24 de diciembre de 2013

Causa y efecto



Todo acto tiene un efecto, cualquier cosa que hagamos o dejemos de hacer tendra una consecuencia concreta y a su vez cualquier cosa que nos este ocurriendo sera producto de una causa, de un hecho que haya llevado a experimentar tal o cual cosa.
Esto tambien se refiere a las palabras, incluso a los pensamientos, ya que todo ello es energia y la energia no se destruye, se transforma y regresa a nosotros.
Es por eso que tenemos que ser cuidadosos, no solo con lo que hacemos si no tambien con lo que decimos y pensamos.
Cuantas veces nos sorprende que estemos experimentando cosas que creemos no merecer, que creemos que son por culpa de las circunstancias o las personas que nos rodean. Así no comprendemos el verdadero significado de la experiencia, nos quedamos en nuestra posición de victimas cómodamente esperando que los demás arreglen la situación que “han causado”.
Nada puede haber mas equivocado. Somos nosotros los causantes de todo, de manera consciente o inconsciente hemos hecho algo que ha conducido a experimentar esto.
Saber esto nos ayuda de momento a aceptar e intentar comprender porque estamos en esta situación, y ademas nos obliga a tener cuidado para el futuro, a mimar, por decirlo así, nuestra vida en beneficio de un futuro mejor.
Es la ley de la siembra y la cosecha, la siembra es voluntaria pero la cosecha es obligatoria, siempre habrá que recoger lo sembrado.
Pilar.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Si hubiera alguna manera de saber

Tengo trece años y soy una chica, corre el año 1973
En el mundo pasan muchas cosas, nuevos dictadores, guerras, dictadores viejos que se resisten a dejar el poder ni que sea por muerte natural…
Pero yo no se nada de eso, tengo bastante con intentar vivir en mi.
Mi cuerpo esta cambiando rápidamente, me miro al espejo y no me reconozco, pero eso no es lo peor, siento que mi familia tampoco me conoce.
Me pregunto ¿que hago aquí? Como he venido a parar en esta familia y esta sociedad que no saben nada de mi
Nadie me pide opinión para nada, ni tan solo lo que se refiere a mi futuro, alegan que aun soy una niña para decidir eso, es curioso porque parece que mi edad se estira y se contrae según intereses que desconozco
Ya no puedo jugar con muñecas ni salir a la calle con mis amigas, para eso soy demasiado mayor, pero si puedo cuidar de mis hermanos cuando mis padres tienen que salir, este mundo esta lleno de contradicciones y yo voy de un lado a otro sin saber donde ubicarme, soy mayor para estar con niñas y soy pequeña para estar con adultos.
Así que intento mantenerme en un estado intermedio, dedico todo el tiempo que puedo a leer, historias “femeninas” que me mantienen en un estado de fantasía mucho mas agradable que el real, con todo no puedo leer tanto como quisiera pues consideran que una mujercita (nuevo termino que describe que no eres ni niña ni mujer) no se puede pasar las horas leyendo, debe ayudar a su madre y aprender las labores del hogar, tampoco hay muchos libros en la casa para leer y pedir que te compren uno, solo se puede hacer una vez al año (reyes).
Tengo un secreto, estoy enamorada, pero claro eso entra en la categoría de adultos por lo tanto no me corresponde, aunque no se como lo puedo evitar, claro que es un amor platónico, de esos que suelo leer o ver en algunas películas, creo que esto también ayuda a mi estado ausente y falto de interés por las cosas que me rodean, vivo en un continuo futuro que no se si llegara
En general me siento muy triste por dentro, no suelo llorar (soy demasiado mayor) pero siento que lloro por dentro, es como una lluvia de otoño lenta pero constante de esas que van formando ríos en las aceras, cuando miro a mi interior me siento así, sola en mitad de la lluvia, como una hoja caída que va de un lado para otro. ¿Es normal  mirar en mi interior? no se si el resto de la gente lo hace
Ahora eres demasiado mayor, ahora demasiado pequeña, ¿que se espera de mi? Ni lo se ni me interesa.
No tengo a penas amigas ya que hemos cambiado de casa recientemente, así que no puedo comparar si a otras “mujercitas” les pasa lo mismo o es solo a mi, de vez en cuando me sacan de mi nube y me reprochan que estoy en “la edad del pavo”, no se muy bien que es, pero quizás sea algo común, en ese caso no me sentiría tan sola ni tan diferente, aunque sospecho que no es algo que agrade a los adultos, quizás ellos no la tuvieron.
No tengo idea de como sera mi vida de adulta aun no se que en treinta años las cosas cambiaran mucho en el mundo, que cosas que ahora me parecen imposibles serán comunes, tampoco se que me convertiré durante un tiempo en lo que se espera de una “mujercita”, es decir en madre y esposa abnegada.
Ignoro que mi lluvia interior no cesara nunca y que tendré que bajar de mi nube para hacer frente a una vida que no es la que estaba programada en principio y como no lo se no puedo decidir si me quedo a experimentarlo o dimito, si hubiera alguna manera de saber…
Pilar

sábado, 21 de diciembre de 2013

¿Quienes somos?

silencio-do-blogMejor diría quien no somos.
No somos un hombre o una mujer, tampoco somos padre, madre, abogado, funcionario, conductor de autobús… nada de eso somos, eso es solo lo que hacemos, es la herramienta para manifestar nuestra experiencia.
Ahora que ya sabemos lo que no somos, intentemos aclarar lo que si somos.
Somos un Alma individual pero a la vez conectada con todas las demás Almas incluidas las de las cosas y por supuesto las de los animales.
A través del cuerpo físico y de los roles que adoptamos aquí, es como desarrollamos la experiencia que hemos pactado vivir en esta encarnación.
Las personas que nos acompañan en esta tarea, sean padres, hijos, compañeros de trabajo o amigos son Almas que se han prestado amablemente a colaborar en nuestro crecimiento, así como nosotros en el de ellos, es un pacto acordado en otra dimensión, en otro nivel de conciencia.
Hay cosas que inevitablemente tendremos que aprender y por las que de una forma u otra tendremos que pasar, el libre albedrío nos permite elegir el camino y el momento para vivirlo, pero por mas vueltas que demos la tarea hay que hacerla, en caso contrario esa tarea se sumara a las propias de la siguiente encarnación.
Nada de lo que experimentamos esta fuera de nuestras posibilidades, pues todo lo hemos creado de acuerdo al momento evolutivo de nuestra Alma.
Lamentablemente al no ser consciente de esto, muchas veces nos hundimos en la desesperación de no entender porque nos pasa eso o lo otro.
Cuando pasa la crisis, porque siempre pasa, es cuando nos damos cuenta de lo mucho que hemos aprendido, de lo mucho que hemos crecido.
No siempre es necesario sufrir en propia persona para aprender, observando y empatizando con los demás facilitaríamos mucho nuestra tarea, estaríamos preparados con una conducta de referencia.
Si fuéramos conscientes de que nada nos puede pasar porque nosotros no somos lo que hacemos la mayoría de nuestros miedos y limitaciones desaparecerían y aceptaríamos las experiencias solo como una forma de avanzar.
Pilar.

viernes, 20 de diciembre de 2013

Miedo

miedoEl miedo, es realmente útil, muy necesario para la supervivencia, en realidad si no tuviéramos la ayuda del miedo seriamos unos temerarios, andaríamos arriesgando la vida inútilmente, el miedo es de particular utilidad a la hora de enfrentarse a un potencial peligro real y físico tal como un camión a punto de atropellarte, el sonido de las sirenas en una ciudad bombardeada, un atraco o cosas similares, concretas, que aparecen en un momento dado y a las que hay que reaccionar con rapidez y sin pensar, ese es el papel del miedo, pensar por nosotros y protegernos.
También es cierto que el sistema social en el que vivimos se sustenta en el miedo, nos inculcan que podemos perder el trabajo, la casa, incluso la vida si no actuamos y pensamos “políticamente correctos” si intentamos pensar por nosotros mismos y por nosotros mismos solucionar nuestra vida
Así llegamos al miedo que nos paraliza para desarrollarnos, ese miedo que nos impide cambiar de trabajo o iniciar una relación por que no sabemos que puede pasar, nos pasamos la vida temiendo cosas que realmente no pasaran, pero que nos impiden avanzar en nuestro camino
Cuando sea este el caso, cuando tengamos que tomar una decisión, o cambiar algún aspecto de nuestra vida con el que no estamos satisfechos, es el momento de ignorar al miedo y actuar según nos dicte nuestro corazón, ¿arriesgado? En absoluto, todos sabemos lo que tenemos que hacer, dentro de nuestro corazón todo el mundo lo sabe, otra cosa es que queramos hacerlo o en este caso que nos de miedo, ya sea porque es algo poco convencional, económicamente arriesgado, o emocionalmente distinto.
Ese miedo que nos hace quedarnos donde estamos, negándonos la posibilidad de evolucionar, o simplemente de encontrar otras cosas que nos harían sentir mas felices, cosa al fin y al cabo para la cual estamos hechos.
Pensemos, pues, que si nadie se hubiera arriesgado con ideas distintas, con formas de hacer diferentes, aun estaríamos en la edad de piedra.
Hay que atreverse a salir de la cueva, iniciar nuevas actividades que nos den ilusión de vivir, cambiar hábitos que adquirimos y que ya no nos resultan útiles.
Lanzarnos a vivir nuestra propia vida, con nuestra escala de valores, nuestros propios intereses y prioridades, aunque a veces tengamos la sensación de caernos de un precipicio, es nuestro precipicio y si nos hemos tirado antes de tiempo, o mal, no pasa nada, se vuelve a intentar y listos, no es necesario guardar el dolor del fracaso.
Pilar.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Todo lo que puede desear una mujer


linda-chica-enamorada-8827Hacia días que nos mirábamos, cruzábamos miradas ardientes de deseo.
Finalmente me decidí a hablarle. Se que ahora nuestro amor es imposible, pero te deseo… te deseo tanto que haré cualquier cosa por tenerte. Contigo… contigo se que puedo ir hasta el fin del mundo, que guardaras mis secretos, que me seras fiel. Te daré todo lo mio, las cosas que mas quiero, las que me unen a mi mundo, incluso… incluso te daré mi dinero, si… se que tu sabrás valorar y cuidar esta entrega de una parte tan importante de mi, porque tu eres perfecto. Tu piel… ohhh !!!!! esa piel, tan suave, tan lisa… acariciarte sera un placer para las yemas de mis dedos, recorrer tu contorno despacio… reconociendo cada rincón.
Se que todas me tendrán envidia cuando me vean pasear contigo, cuando vean la complicidad que hay entre nosotros y es normal porque tu eres único… eres todo lo que puede desear una mujer
Por eso cuando veo que otra mujer te mira, los celos me clavan su ardiente espada, me siento desvanecer con la posibilidad de perderte, de quedarme sin ti aun antes de haberte tenido, esos celos me arrastran una y otra vez hacia donde tu estas para comprobar que nadie mas pone sus sucios ojos sobre ti.
Porque tu eres mio, lo sabes y lo se, desde el día que te vi, con ese porte sencillo pero elegante, que esconde tu gran belleza interior. Deseo conocerte íntimamente descubrir poco a poco las cualidades que no muestras, abrir con ternura esos lugares que tu reservas para mi. Porque tu también lo sabes, eres consciente de que soy la mujer de tu vida.
Nuestra vida juntos sera ideal, viajaremos, estaremos con amigos, con la familia, incluso cuando trabaje tu estarás conmigo, hasta que finalmente lleguemos a casa donde nos espera el calor del hogar donde tu y yo podamos descansar en nuestra habitación compartida. Si, estaremos juntos día y noche, nadie nos separara
Este bolso del escaparate me esta volviendo loca !!!!!!!
Pilar

miércoles, 18 de diciembre de 2013

¿Co-incidencia o sincronicidad ?

sincronicidad-cuando-coincidencia-supera--L-2Cuantos de nosotros nos hemos sorprendido ante una co-incidencia, cuantas veces todo cambia a raíz de un hecho totalmente azaroso, o eso es lo que pensamos.
Nada de eso, las aparentes coincidencias no son mas que la respuesta a lo que estamos pensando, a lo que estamos prestando atención.
Si nosotros enfocamos nuestra atención en un problema o una duda respecto a una decisión, con sorpresa veremos como ocurren cosas a nuestro alrededor que ayudan a desenredar nuestro pensamiento, una frase en una canción, una conversación ajena a nosotros, una película, ¿quien sabe? Cualquier cosa nos pone sobre la pista del camino a seguir, y ya podemos dar un paso, si nos mantenemos atentos pronto veremos otras señales que se suceden unas a otras en total sintonia a lo que ocupa nuestros pensamientos.
Sincronicamente nos acercamos a la respuesta o solución, es así de sencillo, solo es necesario poner atención, dejar espacio para que la magia se manifieste, sin obsesionarse ni cerrarse a nuevas maneras de ver el asunto.
Frecuentemente cuando no pensamos conscientemente en nuestro problema surge de manera “espontanea” la solución.
A este respecto es muy ilustrativo el libro Las nueve revelaciones de James Redfield, en el podemos entender como el fluir de los acontecimientos desencadena los hechos.
En cualquier caso no se requiere ningún poder especial ni preparación especifica, basta con saber que es así como funciona y esperar que suceda, no precipitarse ni forzar nada, la sincronía esta en todo, aprendamos a reconocerla.
Pilar.

martes, 17 de diciembre de 2013

Desencuentro


DESENCUENTRO_120x108cmCaminaba deprisa por la acera, hoy era un día importante, al fin , después de años de frustraciones había tomado una decisión.
Si, hoy se lo diría, le diría a Ana que todo había terminado, que estaba harto de tanta apatía, de incontables horas delante del televisor sin nada que decirse, de la compra en el supermercado una vez al mes, de domingos con sus padres, de noches frías y de discusiones calientes.
Estaba decidido, ni un día mas, no mas tardes de fútbol desde casa, no mas cervezas de marca blanca, no mas escusas a los compañeros de trabajo para no ir a las cenas
Se sentía joven, tenia ganas de vivir, de hacer cosas con gente, conocer a otras personas. Desde que se caso con Ana hace mas de diez años apenas habían salido, todo su afán era pagar la hipoteca de un piso que les facilito su suegro y en el que nunca se sintió a gusto, odia esa cocina que da a un tragaluz donde se escuchan las conversaciones de los vecinos, el olor de sus comidas y hasta a veces algún desmadre sexual.
Se acabo, ahora mismo se lo diría y quedaría libre para siempre de esta triste vida, lamentaba el fracaso, tampoco quería hacerle daño, pero no quería arruinar la vida que le quedaba.
Con esos pensamientos se encamino a su casa, al abrir la puerta se dio cuenta de que no había nadie, que raro, pensó, bien, mejor, así me pondré a recoger mis cosas y cuando venga sera mas fácil
Al entrar en la cocina vio una nota en la puerta de la nevera pero metido como estaba en sus pensamientos no se paro a leer, mas tarde mientras hacia la maleta supuso que Ana habría ido por alguna razón a casa de sus padres, eran mayores y por cualquier cosa la llamaban.
Al recoger sus cosas se dio cuenta de que todo estaba raramente ordenado, por un momento tubo la sensación de que faltaban cosas, pero no le dio mas importancia estaba concentrado en formular un discurso conciso y tajante y no presto demasiada atención a los detalles.
Termino de recoger sus cosas y Ana aun no había vuelto, se sentó nervioso en el sofá, se levanto, dio vueltas por el piso por si se le olvidaba algo, fumo un cigarrillo absorto en los planes para su nueva vida, Ana no venia
Finalmente decidió escribirle una nota, ya tendrían tiempo de hablar, si, eso haría, una nota, así no tendría que verla llorar, no tendría que soportar sus reproches.
Cuidadosamente escribió la nota describiendo con detalle todas sus frustraciones, sus deseos y también dejo escrito que no quería hacerle daño y que estaría dispuesto a negociar un buen divorcio
La dejo encima de la mesa, cogió sus cosas, dio un rápido vistazo a lo que dejaba atrás y salio de casa cerrando tras de si, en ese momento se acordó de que no había leído la nota, bueno ¿que mas daba ya? No quería saber nada, quería volver a empezar.
No supo que en la nota Ana le decía que se marchaba, que no podía mas, que estaba harta de la vida apática que llevaban, harta de incontables horas delante del televisor sin nada que decirse, harta del supermercado una vez al mes, de tardes de fútbol en casa, de pagar la hipoteca de un piso que nunca le gusto pero que quedaba cerca del trabajo de Juan, de noches frías y de discusiones calientes
Que se sentía joven y tenia ganas de vivir, de hacer otras cosas, de conocer otras gentes, de comprarse ropa sin sentirse culpable, de dejarse el pelo largo que desde que se caso no había llevado, pues a Juan le molestaba para dormir
Que se marchaba para siempre, que no quería hacerle daño y que estaba dispuesta a negociar un buen divorcio
Pilar

lunes, 16 de diciembre de 2013

Responsabilidad

list_640pxTodas las cosas que acontecen en nuestra vida son nuestra responsabilidad, no solo las cosas cotidianas como nuestro trabajo o nuestra familia, es algo mucho mas profundo, somos responsables de todo lo que estamos experimentando, de todas las personas que nos ayudan en este proceso, de todos los problemas y obstáculos que nos “encontramos” puesto que todo lo hemos creado nosotros.
Así es, creamos las circunstancias que nos aporten un determinado conocimiento, las creamos a medida para nuestro poposito y si no entendemos las volvemos a crear una y otra vez, por eso hay personas que tropiezan siempre con la misma situación, que aun cuando afirmen no desearla siempre están metidos en la misma experiencia.
Por eso es esencial tomar responsabilidad, no solo de nuestros actos si no también de nuestras circunstancias, saber que todo es creación nuestra que todo esta allí para mostrarnos algo que debemos ver, ya sean personas, situaciones o hechos, todo esta allí para ti, para manifestar la experiencia que necesitas en cada momento.
Es cierto que podemos pensar que nadie seria capaz de crearse una enfermedad, una guerra, una tragedia, pero también es cierto que en cada una de estas duras experiencias aflora nuestro yo real, cuando alguien desarrolla una enfermedad como el cáncer tiene la oportunidad de ver las cosas desde otro punto de vista, de valorar las cosas que hasta el momento han sido su vida,
unas personas se dan cuenta de esta oportunidad y cambian sus valores y prioridades, otras lo toman como un agravio contra ellas y se revelan contra lo que creen una injusticia, no importa, todas las reacciones son buenas y necesarias para el propio crecimiento individual de cada uno
Cabria preguntarse ¿porque estoy creando esto? ¿que me esta enseñando? ¿que necesito soltar para no manifestar esta realidad que no deseo?
Al tomar responsabilidad sobre nuestras circunstancias estamos en disposición de manejarlas, de entenderlas e incluso de reconducirlas ya que podemos crear los caminos que nos lleven a soluciones positivas
En estos tiempos de elevación de conciencia es necesario hacerse cargo de la forma en como queremos aprender.
Pilar.