Tengo trece años y soy una chica, corre el año 1973
En el mundo pasan muchas cosas, nuevos dictadores, guerras,
dictadores viejos que se resisten a dejar el poder ni que sea por muerte
natural…
Pero yo no se nada de eso, tengo bastante con intentar vivir en mi.
Mi cuerpo esta cambiando rápidamente, me miro al espejo y no me
reconozco, pero eso no es lo peor, siento que mi familia tampoco me
conoce.
Me pregunto ¿que hago aquí? Como he venido a parar en esta familia y esta sociedad que no saben nada de mi
Nadie me pide opinión para nada, ni tan solo lo que se refiere a mi
futuro, alegan que aun soy una niña para decidir eso, es curioso porque
parece que mi edad se estira y se contrae según intereses que desconozco
Ya no puedo jugar con muñecas ni salir a la calle con mis amigas,
para eso soy demasiado mayor, pero si puedo cuidar de mis hermanos
cuando mis padres tienen que salir, este mundo esta lleno de
contradicciones y yo voy de un lado a otro sin saber donde ubicarme, soy
mayor para estar con niñas y soy pequeña para estar con adultos.
Así que intento mantenerme en un estado intermedio, dedico todo el
tiempo que puedo a leer, historias “femeninas” que me mantienen en un
estado de fantasía mucho mas agradable que el real, con todo no puedo
leer tanto como quisiera pues consideran que una mujercita (nuevo
termino que describe que no eres ni niña ni mujer) no se puede pasar las
horas leyendo, debe ayudar a su madre y aprender las labores del hogar,
tampoco hay muchos libros en la casa para leer y pedir que te compren
uno, solo se puede hacer una vez al año (reyes).
Tengo un secreto, estoy enamorada, pero claro eso entra en la
categoría de adultos por lo tanto no me corresponde, aunque no se como
lo puedo evitar, claro que es un amor platónico, de esos que suelo leer o
ver en algunas películas, creo que esto también ayuda a mi estado
ausente y falto de interés por las cosas que me rodean, vivo en un
continuo futuro que no se si llegara
En general me siento muy triste por dentro, no suelo llorar (soy
demasiado mayor) pero siento que lloro por dentro, es como una lluvia de
otoño lenta pero constante de esas que van formando ríos en las aceras,
cuando miro a mi interior me siento así, sola en mitad de la lluvia,
como una hoja caída que va de un lado para otro. ¿Es normal mirar en mi
interior? no se si el resto de la gente lo hace
Ahora eres demasiado mayor, ahora demasiado pequeña, ¿que se espera de mi? Ni lo se ni me interesa.
No tengo a penas amigas ya que hemos cambiado de casa recientemente,
así que no puedo comparar si a otras “mujercitas” les pasa lo mismo o es
solo a mi, de vez en cuando me sacan de mi nube y me reprochan que
estoy en “la edad del pavo”, no se muy bien que es, pero quizás sea algo
común, en ese caso no me sentiría tan sola ni tan diferente, aunque
sospecho que no es algo que agrade a los adultos, quizás ellos no la
tuvieron.
No tengo idea de como sera mi vida de adulta aun no se que en treinta
años las cosas cambiaran mucho en el mundo, que cosas que ahora me
parecen imposibles serán comunes, tampoco se que me convertiré durante
un tiempo en lo que se espera de una “mujercita”, es decir en madre y
esposa abnegada.
Ignoro que mi lluvia interior no cesara nunca y que tendré que bajar
de mi nube para hacer frente a una vida que no es la que estaba
programada en principio y como no lo se no puedo decidir si me quedo a
experimentarlo o dimito, si hubiera alguna manera de saber…
Pilar
No hay comentarios:
Publicar un comentario